Capitulo 41: "Una dulce reconciliacion"
El corazón de Giulia bombeaba con una fuerza desmedida. Todo aquello parecía… irreal.
— ¿Cómo me encontraste? — preguntó después de volver a la realidad.
Ares tomó sus manos y sonrió.
— Fue la noche más larga y desesperante de mi vida — confesó —. Y tuve que hacer uso de mi poder para saber que habías tomado un vuelo a Roma. Y entre una cosa y otra, Cantera dio con este lugar. No tenía la certeza de que podías estar aquí, pero en serio suplicaba que así fuera.
Giulia exhaló. Todavía flotaba en aquella nube. Dios, Ares estaba allí. ¡Allí!
— Entonces, tú y esa mujer… — bajó la mirada, de pronto avergonzada, celosa, celosa hasta más no poder.
Ares tomó su barbilla y la instó a mirarlo a los ojos.
— No hay nada. Te lo juro. Lo que viste… fue un error. Yo no lo provoqué. Todo confabuló para que tu vieras algo que no eras.
Giulia jugó con sus dedos, y asintió.
— Te creo.
— Bien — exhaló él, aliviado.
— Pero aun no entiendo que… haces aquí. Tú me dijis