Traicionada por su hermana gemela y su prometido. Nicole Leblanc, ya no tiene fe en el amor. Hasta que conoce, por accidente, a Aiden King, un hombre frío, soberbio y arrogante. Un matrimonio que comienza de la manera más insólita, pero que dará inicio a la más bella historia de amor. Ella creyó haber alcanzado la felicidad, pero no sabía que un día todo cambiaría. Y de nuevo se verá envuelta en la traición y el dolor. Solo que esta vez no se permitirá salir lastimada.
Leer másCAPÍTULO 1.
Nicole Leblanc entro el departamento de su novio profundamente emocionada, llevaba un regalo en la mano, hoy estaba dispuesta a sorprenderlo.Tan pronto como se acercó, los jadeos y gemidos en la habitación detuvieron sus pasos. Ella se acercó despacio y escuchó a través de la puerta.―Daniel… ¿Cuándo le dirás a mi hermana sobre nosotros?La voz de la mujer resultó muy familiar para Nicole, y al conocer a la dueña de esa voz, quedó petrificada. Con lentitud empujo suavemente la puerta y, con incredulidad, miro a dos personas acostadas en la cama.Una de ellas… es su hermana gemela, Aspen.Su corazón se contrajo y por un momento le fue difícil respirar. Estas dos personas, una es su hermana de sangre y la otra, es su novio de toda la vida.―Daniel, sabes que te amo, ¿verdad?―Lo sé.El hombre sonrió a la chica y bajo su cabeza para tomar sus labios nuevamente.Las dos personas siguieron disfrutando del placer, sin saber que estaban siendo observados por otra persona. Nicole de repente no pudo soportar tal situación, empujo la puerta con fuerza y enfrento a los amantes.Las dos personas abrieron los ojos con sorpresa, Nicole se acercó a la cama y empujo a Daniel, para luego mirar a su hermana con dolor e ira.Aspen, quien estaba sorprendida, miro a su hermana y susurro asustada.―Nicole… hermana…Daniel, en cuanto vio a Nicole, rápidamente tiro de la sabana para cubrir su desnudes, miro entre las dos hermanas y su expresión se congeló.―Nicole, yo… déjame explicarte.Nicole quería mandarlo al diablo, pero en este momento las palabras no lograban salir. El dolor de saber que su hermana y su novio la habían estado engañando, la domino por completo.Sus piernas parecieron tener conciencia de sí misma, retrocedieron y se dieron la vuelta para escapar del lugar. Salió corriendo del departamento, corrió hacia la calle, desesperada, no pudo evitar dejar que sus lágrimas se derramaran. Corrió sin saber a dónde iba, cuando finalmente se detuvo, se derrumbó en el suelo y dejo que las lágrimas cayeran sin control.Al llegar a la parada de autobuses, un Maserati se detuvo a su lado, el hombre tenía una risita en sus labios. Nicole estaba asustada y asqueada, así que corrió hacia el autobús antes de que se atreviera a bajar del auto. Mientras corría su corazón estaba a punto de salirse de su pecho.No tenía otro sitio a donde ir, así que tuvo que volver a casa de Lola, otra vez.Estaba sola en el pequeño salón y miro a su alrededor. Incluso el pequeño departamento de 70 metros cuadrados le hacía sentirse vacía.Al pensar en Daniel, Aspen y todos los miembros de la familia Leblanc, su rabia era como un incendio ardiente que le quemaba los pulmones y, por último, ni siquiera supo cuándo se quedó dormida.Sus sueños la llevaron a través del tiempo.Estaba en el jardín con su hermana, cazando mariposas con su vestido blanco, jugando y riendo. Cuando se cayó y lastimo su rodilla, Daniel, cuatro años mayor que ella, corrió inmediatamente a levantarla y consolarla.En aquel momento, describió su voz como el sonido más hermoso que nunca olvidaría.Daniel…Aspen rompió a llorar de repente y levanto las manos, llena de sangre a causa de las espinas de las rosas, Nicole miro el rostro de Daniel mirar a su hermana con una mirada compasiva.Entonces él, la bajo inmediatamente para ayudar a Aspen, ignorándola por mucho que lo llamara.―¡Nicole, Nicole, despierta, despierta!De repente, oyó la voz de Lola y abrió los ojos bruscamente.―Si quieres a Daniel, ve a buscarlo, ¿Por qué lloras? ―en cuanto se despertó, Lola la miraba con curiosidad.Han sido compañeras de cuarto durante cinco años y, probablemente porque eran muy amigas, su amistad había crecido y se hablaban de casi todo. Desde la ceremonia de graduación, Nicole se había ido a vivir con su prometido y le sorprendió verla en ese momento en casa. Pero lo que más la sorprendió fue que estaba llorando.Nicole, rápidamente se secó las lágrimas y le dio una sonrisa rápida ―No pensé que volverías hoy.La mirada de la amiga era aguda y se dio cuenta de que Nicole le estaba ocultando algo, además, sus ojos estaban rojos. Por lo que estaba segura de que algo había pasado.― ¿Qué sucedió? ¡Si me entero de que Daniel te lastimo, será lo último que haga en su vida!Lola era una joven impetuosa y acribillo a Nicole con una serie de preguntas. Nicole conocía los alcances de Lola y también estaba el hecho de que tendría que vivir aquí, así que no podía ocultar nada.Así que rápidamente, le hablo de Aspen y Daniel, y de las malas intenciones de su madrastra.Al final de la historia, Lola se enfureció, cogió un cuchillo y se dispuso a salir-―¡Voy a matar a esa zorra!Nicole la abrazo por detrás y no la dejo salir.―Por favor, no vale la pena.―¿Cómo dices eso? ¿Quién podría soportar un golpe así? Fuiste traicionada doblemente. ¡Espero, que Daniel no vuelva a tener una erección en su vida!Lola estaba tan enfadada que no paraba de maldecir.―Aspen es la única en el mundo que podría hacer algo tan sucio, como robarle el hombre a su hermana. Lo que es aún más repugnante es que Daniel, que es una persona decente y que supuestamente ha estado enamorado de ti todos estos años, no haya sido capaz de resistir la tentación y haya sido seducido por esa zorra hipócrita.Lola se sirvió un poco de agua para tratar de calmar su cólera.Después de expresar su enojo, Lola se sintió mejor y se volvió para consolar a su amiga ―No te preocupes, me tienes a mí, ¿de acuerdo? Además, con tu belleza puedes tener al hombre que quieras, no estés triste por esa escoria.Nicole intentó esbozar una sonrisa ―Ahora lo más importante, es que necesito encontrar trabajo.Lola frunció las cejas confundida ―¿No fuiste a la entrevista en el grupo Continental?Nicole bajo la mirada y Lola se dio cuenta inmediatamente de que toda esta situación la afectaba más de lo que se imaginaba.―No te rindas, eres inteligente, hermosa, estoy segura de que conseguirás el puesto. Eres la mejor diseñadora que conozco.Nicole estuvo de acuerdo e inmediatamente ajusto su estado de ánimo.Lola la tomo de la mano y la llevo a rastra a su habitación. ―Dicen que las penas se sobrellevan mejor con un poco de alcohol. ―Abrió el armario y saco un sexi vestido plateado.Nicole no estaba de ánimos para salir, así que negó con la cabeza y dijo que dormiría temprano. Pero Lola era persistente, así que una hora más tarde, ambas subían a un taxi que las llevaría a uno de los clubes más exclusivo de la ciudad.’Black Rose’ es uno de los clubes nocturnos más selectos de la ciudad. Sus instalaciones son de primera categoría y el área VIP solo está disponible para los clientes miembros del club.Lola ya había estado en el club varias veces, y tras arrastrar a Nicole hasta unas escaleras que daban a un salón VIP, se sentó en el sofá con una pose muy relajada. Ambas bebieron y hablaron de lo cruel que es el amor, después de unos cuantos Cosmopolitan, la sobriedad de ambas se perdía lentamente. En ese momento, Lola sintió una urgente necesidad de ir al baño, lo cual era comprensible después de haber bebido tanto. Le dijo a Nicole que esperara y salió deprisa.Al cabo de un rato, una voz masculina y magnética resonó en la otra habitación.El hombre dijo fríamente ―Vete, quiero estar solo.Aiden no deja de pensar en Sisi. Después de tanto tiempo juntos, hoy finalmente ambos tendrían su primera noche juntos, ella es la mujer que quiere y que su madre no la acepte, no hace la diferencia.―Nena, no necesitamos tus servicios esta noche. ― otra persona habló desde el mismo lugar.Al cabo de un rato se hizo el silencio absoluto.Nicole trataba de escuchar la conversación, pero terminó más rápidamente de lo que esperaba. Poco después un olor a humo se percibía desde el otro lado de la habitación. Nicole no pudo evitar fruncir la nariz, dudo un momento, se levantó y se acercó con cautela. La puerta estaba entreabierta, se asomó un poco y vio a un atractivo hombre, de pie, solo, junto a la ventana.Nicole no pudo evitar observarlo con detenimiento. Él era, alto y atlético, exudaba una nobleza natural que, incluso en una simple acción como fumar, lo hacía ver sexi y encantador.Al darse cuenta de que lo observaban, giró la cabeza y vio a Nicole, que abrió los ojos asustados al verse descubierta. Con frialdad y sarcasmo en la cara, dijo.―¿No dije que no quería compañía?Mientras se observaban mutuamente, la respiración de Nicole se aceleró inexplicablemente y sus pies tomaron vida propia y se acercaron al hombre. De repente, sin pensarlo, dijo ―Fumar es malo para la salud… así que deberías fumar menos.La delicadeza y suavidad de sus palabras lo hicieron perder el sentido por un momento, pero pronto lo recupero.―¿Y quién eres tú para mí? ¿Quién eres tú para decirme lo que tengo que hacer?En un movimiento inesperado, rodeó la cintura de Nicole con su brazo y la atrajo hacia él. Rodeándola con sus brazos.El calor de su piel traspasó la fina tela de su blusa y el corazón de Aiden latía con fuerza mientras ella forcejeaba.Nicole tomó un poco de aire y el penetrante aroma masculino invadió sus fosas nasales, no pudo evitar sentirse nerviosa y balbuceo. ―Suéltame… por favor, suéltame…Nicole estaba un poco asustada, podía ver la ira contenida en sus ojos. Se estremeció.Aiden curvó los labios en una media sonrisa, satisfecho por haber intimidado a esta extraña mujer.―Te mueres por subirte a mi cama, ¿verdad? ―dijo con indiferencia, soltándola y volviéndose para volver al gran sofá de cuero rojo.Él fue quien acaba de abrazarla, ¿verdad?Nicole estaba molesta, pero por supuesto no dijo nada. No se arriesgaría.Lola regresó y la encontró sonrojada y le preguntó con suspicacia ―¿Qué te pasa? Te ves sonrojada.Nicole evadió su mirada y dijo ligeramente ―No digas tonterías.Las dos estaban bromeando y abandonaron la sala VIP.EPÍLOGO. UN AÑO ANTES, OFICINA DEL GRUPO CONTINENTAL. ―Jefe, el señor Kingston, está aquí. Aiden dejo los documentos sobre el escritorio y se puso de pie. ―Hazlo pasar y que no nos interrumpan. Cinco minutos después, un hombre alto de complexión atlética y cabello castaño entro a la oficina. Vestido con un traje Tom Ford, miro con sus ojos verdes a su amigo. ―Aiden King, veo que la vida de casado te sienta bien. ―cuando sonreía un par de hoyuelos se formaban en sus mejillas. ―Elliot Kingston, mi viejo amigo ―se acercó en dos pasos y palmeo su espalda en un abrazo. ―No creí que llegarías tan pronto. Lo guio hasta el sofá y luego sirvió un poco de whisky. ―¿Sigues tomándolo igual? ―Sí. Aiden sirvió dos vasos y le entrego uno antes de sentarse. Elliot tomo un sorbo y dejo que los sabores se deslizaran por su paladar. ―¿Y bien, explícame que eso que quieres que haga por ti? ―Al menos dime cómo estás antes de hablar de negocios ―bromeo Aiden y cruzo las piernas en erlang. ―En
CAPÍTULO 101.Cuando salieron del área abandona, Nicole fue llevada al hospital para una revisión, a pesar de que se negó y le dijo a Aiden que quería volver a casa, este se negó rotundamente y condujo al hospital.Por otro lado, Elena fue trasladada a la oficina de interrogatorios. Los primeros veinte minutos no paraba de llorar y decir que no había hecho nada, sin embargo, Robert se encargó de proporcionar las pruebas en su contra. Como que ella fue la que proporciono el Halcion para sedar a Daniel y Nicole.No le quedo más remedio que confesar. Todos en la sala de interrogatorios quedaron sin palabras cuando escucharon los planes de Aspen.Planeaba asesinar a Nicole y luego quemar su cuerpo, pero antes iba a cambiar sus pertenencias. Quería matarla para luego ocupar su lugar.Cuando Robert le informo sobre esto a Aiden, dio gracias a Dios poder haber llegado a tiempo, no quería imaginar que hubiera hecho si perdiera a Nicole.―Señor, Elena va a ser procesada. Hable con el juez Piar
CAPÍTULO 100.―¡¿Cómo que no se dieron cuenta?! ¡¿Para qué carajos les pago?!―Señor, se escabullo dentro de la camioneta del mantenimiento de jardinería.―¡Son un par de idiotas!Aiden seguía marcando su número, pero siempre lo enviaba al buzón de voz.Daniel, quien se había metido a su auto, de repente tuvo una idea.―¿Y si está con Lola?El marco de inmediato el número de Lola, pero también fue enviado al buzón. Después llamaron a la agencia y les informaron que ella había renunciado recientemente y que dijo que tomaría un descanso en Italia.Aiden maldijo para sus adentros.―¿Dónde más puede estar? No tiene a otra persona a quien recurrir.De repente el teléfono de Aiden sonó y contesto a toda prisa.―¿Nicole?―Disculpe, ¿es usted Aiden?―Sí, ¿Quién habla? ¿Por qué tiene el teléfono de mi esposa?―Encontré este teléfono al costado de la calle, quise devolverlo y marqué el último número de llamadas salientes.Todo el cuerpo de Aiden se tensó.―¿Cómo qué tirado? ¿En dónde?―Calle Lo
CAPÍTULO 99.Aiden cerro la puerta con fuerza, se detuvo y cerro los ojos intentando calmarse. En estos momentos había un huracán de preguntas desarrollándose en su interior.Lo mejor era dejar pasar la noche, mañana abordaría el tema con cabeza fría. Solo que a la mañana siguiente, cuando Nicole bajo al comedor, Aiden ya se había ido.―Roberta, ¿a qué hora salió mi marido?―Se fue bastante temprano ―respondió la mujer mientras le daba de comer al pequeño. Nicole se acercó para saludar a su hijo, pero sus pensamientos estaban todos en Aiden.Después de desayunar y pensárselo mucho decidió llamarlo. El teléfono repicó varias veces, pero nunca se conectó. Así que decidió llamar a su asistente, lo más probable era que estuviera en alguna junta o con un cliente.―¿Señora?―Robert, puedes decirle a Aiden que conteste el teléfono.El hombre miró a su jefe que tenía una expresión fría y lo miraba como si fuera a desaparecerlo. No le quedo más remedio que inventar una excusa.―Señora, el jefe
CAPÍTULO 98.En la suite del hotel, Nicole abrió los ojos y sentía que su cabeza estallaría. Estaba desorientada, abrió y cerro los ojos y también sintió seca la garganta. Cuando pudo enfocar los ojos, se dio cuenta de que estaba en una habitación.«¿Ya estoy en casa? Pero, hace un momento, estaba en la cena…»Recordó que caminaba de vuelta hacia Aiden y de repente todo se oscureció. La habitación estaba un poco oscura, solo la luz plateada de la luna se colaba por la ventana, se inclinó tratando de encender la lámpara a su lado. Cuando lo hizo la sabana se deslizó y dejando sus senos totalmente expuestos.―¡¿Qué demonios?! ―miro hacia abajo y se dio cuenta de dos cosas, una estaba desnuda y dos, no era su habitación.Asustada, miro lentamente a su lado, solo para ver a un Daniel con los ojos cerrados y sin camisa. Presa del pánico, se levantó y envolvió su cuerpo con la sabana. Sus ojos se abrieron como platos cuando vio que también estaba desnudo.―¡Daniel! ―grito y, comenzó a mirar
CAPÍTULO 97.La cena benéfica se llevó a cabo en el hotel “MANDARÍN ORIENTAL”Cuando llegaron, ya era casi la hora de la apertura, Aiden había llegado a casa e inusualmente no hablo mucho durante el camino. Nicole no le pregunto que le sucedía, ella también estaba sumida en sus propios pensamientos.Esa noche eligió llevar un vestido estilo sirena azul rey de tela metalizada, la prenda realzaba completamente su figura de reloj de arena, su espalda estaba expuesta dejando a la vista su delicada piel, en sus pies un par de sandalias plateadas y su cabello estaba recogido en una coleta.Aiden, aunque estaba molesto, no pudo evitar sentirse orgullo y mirarla con dulzura. Le haya mentido o no, amaba a esta mujer.Tomados de la mano, caminaron hacia el salón lleno de gente, tan pronto como aparecieron, atrajeron la atención de todos los presentes, especialmente la de Aspen.Sus ojos llenos de maldad no dejaban de mirarlos, no importaba que pareciera una desquiciada, los miraba implacablemen
Último capítulo